Remontemonos a ese momento sublime y a la vez inesperado para el Apostol amado por Jesus, llamado Juan el cual a causa de la difusion integra del evangelio se encontraba exiliado en la islas de patmos, en los años de persecucion y dispersion judia, estaba el segun detalla el texto biblico en el Dia del Señor, recalcemos esto, el estaba en comunion perfecta con El Padre, se hallo en el momento preciso, en el minuto exacto y el lugar correcto para recibir una teofonia de Cristo resucitado, al cual el habia conocido en la carne pero ahora ya no por si, el se encontraba En El Espiritu, que declaracion tan acertada y profunda, el recibio esta revelacion porque el ya mantenia una comunion con el Espiritu, muchas personas se preguntan y porque estas experiencias no se dan en nuestras vidas, porque no somos tan sensibles al mover de la shekina de Dios, porque andamos en los placeres de nuestra carne, nuestros pensamientos se enraizan en las cosas materiales, nuestro enfoque esta en el Yo, y no en Cristo Fil. 4:8, ahora es menester hallar ese estado espiritual para recibir lo espiritual, cambiar de atmosfera, de dimension para ingresar al reino espiritual, el cual sabemos no comparte carne ni sangre, Juan se hallaba en una union espiritual y eso es lo que lo preparo para poder ver un dislumbre de la eternidad futura, anhelamos ver a Dios en accion, si es asi volvamos nuestro rostro a Dios y el se dejara hallar por nosotros.
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